Mi cuenta
    Ellen Page: "Freeheld' muestra el impacto emocional que tiene la falta de igualdad"

    La película de Peter Sollett, con la ganadora del Oscar Julianne Moore, se estrena en España este viernes 6 de mayo.

    La ganadora del Oscar Julianne Moore (Siempre Alice) y la nominada a la estatuilla Ellen Page (Juno) protagonizan la película Freeheld, un amor incondicional que, tras pasar por los Festivales de Toronto y San Sebastián, se estrena en España este viernes. Se trata de un drama reivindicativo sobre los derechos de los homosexuales dirigido por Peter Sollett (Nick y Nora, una noche de música y amor), que lleva a la gran pantalla la verdadera historia de Laurel Hester (Moore), una oficial de policía del condado de Ocean, en Nueva Jersey (EE.UU) que, tras ser diagnosticada con cáncer terminal en 2005, apeló frente a una junta para asegurar los beneficios de su pensión a su novia, Stacie Andree (Page).

    La vida de Hester y Andree ya fue adaptada en 2007, e incluso se alzó con el Oscar en 2008 al Mejor Corto Documental. En 2013, siete años después de la muerte de la protagonista, el estado de Nueva Jersey legalizó el matrimonio gay, y en 2015 este fue extendido por el Tribunal Supremo a todo EE.UU. Este es el encuentro que mantuvimos en San Sebastián con Ellen Page, actriz y productora de la cinta, que en 2014 declaró públicamente su homosexualidad en una conferencia de apoyo a jóvenes LGBT. Michael Shannon, Steve Carell, Luke Grimes, Gabriel Luna y Josh Charles completan el elenco.

    Desde que anunciaras tu homosexualidad, ¿has vivido los problemas que vivió Stacie?

    Sí, por supuesto. Y también lo llevé un poco al 'set' de rodaje para interpretarla. Sé perfectamente lo injusto y lo triste que es vivir en esa situación cuando todavía no has salido del armario. Por eso ahora mismo me siento completamente feliz de ya no tener que estar en esa situación.

    Sabemos que Stacie estuvo en el 'set'. ¿De qué hablaste con ella y cómo te ayudó?

    La verdad es que Stacie es una persona muy, muy generosa, y lo fue con todos nosotros: con el guionista, con el director, con Julianne, conmigo misma... Y no sólo es generosa, sino que además siempre estaba disponible para nosotros. Todo eso teniendo en cuenta que es alguien muy vulnerable porque la historia que contamos es algo muy, muy emocional que ella vivió en primera persona. El tiempo que pasé con ella creo que fue crucial. Antes había visto el documental; lo había visto muchas veces. Pero cuando estuve con ella en persona, pude entenderlo mejor, comprender muchos matices y las distintas capas que tiene el personaje. También ver cómo se mueve, cómo habla... Fue esencial.

    ¿Qué piensas de la visión que da el filme de la mujer? Freeheld, un amor incondicional tiene un marcado tono feminista. ¿Has sufrido alguna clase de sexismo trabajando en Hollywood?

    No. Realmente no es que yo haya percibido que exista un movimiento en contra de las mujeres. Pero sí que es cierto que en Hollywood, como en todas partes, hay más hombres guionistas, más hombres directores... Pero, afortunadamente, parece que las cosas están cambiando ahora. Hay muchas más mujeres involucradas en el cine y, en la medida que sean ellas las que empiecen a contar sus historias, quizá también habrá más papeles y más papeles interesantes para las mujeres. Creo que el problema es una cuestión de diversidad y de aceptar esa diversidad. La situación está cambiando y la condición de las mujeres está cambiando. También pienso que cada vez van a tener más control.

    ¿Hasta qué punto crees que va a contribuir esta película al tema de la igualdad?

    Espero que pueda ser una celebración y que venga a demostrar cómo, en tan poco tiempo, se han logrado tantísimos avances y se han logrado cambiar tantas, tantas cosas. En la película se ve que, si simplemente [Laurel y Stacie] hubieran podido estar casadas, no hubieran tenido que pasar por todo el calvario por el que pasan. Centrándonos de nuevo en las desigualdades, creo que la película también puede contribuir a mostrar el impacto emocional que tiene la falta de igualdad a todos los niveles. Es como si devaluáramos la relación de estas personas y, por ello, ellas también se sienten devaluadas.

    ¿Entonces crees en el poder del cine como motor de cambio social?

    Como también demuestra la película, y tal y como han sucedido las cosas, realmente creo que ha sido gracias a la sociedad. Esta y su movilización han sido las que han hecho posible que cambiase esta situación y que se llegase, por ejemplo, a ese pronunciamiento del Tribunal Supremo. Pero, aún así, sí que creo que una película tan íntima y devastadora como esta puede tener su utilidad: puede conectar con ciertas personas, convencer a algunas que no tienen muy claro el tema de la igualdad, llegar a otras que quizá no se consideren homófobas pero que, en el fondo, puede que sí lo sean.

    FBwhatsapp facebook Tweet
    Links relacionados
    Comentarios
    Back to Top